Jesús constantemente nos invita a que profundicemos en nuestra relación con El; y así como Jesús, educaremos y formaremos a cada persona para que se conviertan en discípulos comprometidos.
“Les doy un mandamiento nuevo: que se amen los unos a los otros. Ustedes deben amarse unos a otros como yo los he amado. En esto reconocerán todos que son mis discípulos, en que se amen unos a otros.” (Juan 13:34-35)
Promoveremos un conocimiento y entendimiento más profundo de quiénes somos, por qué y para qué estamos llamados a ser discípulos Católicos. A través de una relación personal más profunda con Dios, nuestro prójimo y la creación, saldremos al mundo a construir el Reino de Dios.